Durante los últimos 30 años, los diferentes grupos de especialistas, miembros de la organización EHEDG (European Hygienic Engineering and Design Group ) han colaborado en la elaboración, mejora y actualización constante las diferentes directrices para el diseño higiénico que se puedan verificar mediante procedimientos de ensayos normalizados como, por ejemplo:
Recientemente se lanzó una cuarta edición de la Directriz N° 2, la cual propone una metodología para la evaluación de la capacidad de limpieza en el procesamiento de alimentos en sistemas cerrados (limpieza CIP) basado en una comparación, en laboratorio, de la limpiabilidad de un elemento sometido a ensayo con la de un trozo de tubo recto, o tubo de referencia.
La nueva directriz aclara la descripción de la metodología y se incluyen optimizaciones sin cambiar los principios fundamentales, mejorando así la repetibilidad y la reproducibilidad, incluyendo: